¿A qué te dedicas? Es la gran pregunta que parte de mi familia, amigos de la infancia o de ámbitos fuera del profesional me hacen frecuentemente. Y mi respuesta -por aquello de decir algo entendible- suele ser que soy ingeniero industrial. Parece ser una profesión que todo el mundo entiende, si bien ha provocado que me pidan arreglar el motor de un coche, opinar sobre un bioinjerto para sustituir un cartílago o revisar la instalación eléctrica de una casa. En fin, supongo que a mis compañeros informáticos no habrá día que no les pidan que les arregle el PC…

Más allá de esas anecdotas, la verdad es que me dedico a la gestión y estrategia de operaciones…de otros. Básicamente ayudo a que la operaciones de otros funcionen mejor. Sin embargo, no es fácil explicar esto de las operaciones (de ahí que me defina como ingeniero industrial…¡y listo!).

¿Qué son las Operaciones?

Aquí tomo prestadas las palabras del Prof. Jaume Ribera, del que he sido alumno. Él siempre dice que las Operaciones tratan de cómo las personas y las organizaciones hacen cosas, es decir, producen bienes y dan servicios. (Casi) todo lo que vestimos, comemos, usamos, leemos, nos distrae, etc. nos llega por cortesía de los directores de operaciones que han organizado su compra, transporte, producción, distribución, servicio, mantenimiento, etc. A pesar de que habitualmente no lleven el nombre de Director de Operaciones, esto es exactamente lo que hacen.

Este concepto es aplicable a departamentos enteros de empresas industriales (aquí habitualmente les llamamos departamento de producción), así como a instituciones proveedoras de servicios por ejemplo, en un hospital cuando un paciente entra por urgencias y va pasando por diferentes etapas: triaje, analítica, radiodiagnóstico, etc. ), hasta lo que hacemos en casa para organizar las tareas de todos de manera que nos permitan dormir un poco más y aún así que los niños lleguen a tiempo a la escuela después de tomar un buen desayuno. Para muestra este curioso ejemplo de aspectos críticos de las operaciones en el Hard-Rock Cafe:

 

Gestionar correctamente las operaciones de una compañía permite entregar valor a los clientes sin comprometer la rentabilidad sostenible del negocio. Para ello, más que en el qué, las operaciones se centran en mejorar el cómo de la empresa.

Las gafas de operaciones y este blog

El objetivo de este blog es muy humilde: más que aburrir y pontificar con grandes teorías, quiero compartir con vosotros cómo veo el mundo con mis gafas virtuales de operaciones. Compartiré ejemplos de ese cómo de las empresas, dándole un enfoque  práctico y desenfadado. Espero con ello lograr que los conceptos y teorías más complejas de gestión y estrategia de operaciones se puedan entender desde la vida cotidiana.

Empezamos. ¡Qué lo disfrutéis!.

Saludos,

Miguel